A LOS NÚMEROS PRIMOS

Desde hace más de dos mil años,
en el planeta de los Números Primos,
las naves de Genios Matemáticos ,
han aterrizado con ahínco.

Mentes maravillosas del mundo,
se han sumergido en los Mares,
de un problema Matemático profundo,
tratando de encontrar las llaves.

El Santo Grial de las Matemáticas,
subyace bajo el manto de lo indómito,
es el patrón de estrellas románticas,
que son oxígeno e hidrógeno en el
universo de los números.

Euclides probó a través de su cántico
la inmortalidad de los ladrillos,
que cimentan al castillo matemático:
Los famosos y rebeldes Primos.

La distribución de los átomos
de la mas grande ciencia exacta,
parece burlarse del orden
y jamás quitarse la máscara,
Gauss encontró un patrón uniforme,
de aquella partitura fantasma.

Una aproximación no fue suficiente,
Gauss solo escucho algunas notas,
de aquella sinfonía sin precedentes,
el misterio permanecía en flota.

Un discípulo de Gauss: Riemann,
abrió una nueva ventana
tras cerrarse variadas puertas,
donde la luz regularidad proyectaba
a través de la función zeta,
en espera de ser demostrada,
para dejar de ser alma en pena.

Parecía el mapa del tesoro,
que confirmaba un mundo explicable,
un mundo determinista en foro,
Lejos del sol de las probabilidades.

Con aquellos números de dos divisores,
hasta la naturaleza trabaja,
Son cómo la abeja en las flores,
brindan sobrevivencia a la cigarra.

Tantos y tantos son los Hombres,
que se han adentrado a el enigma,
Hardy ,Ramanujan y Montgomery,
Turing y muchos otros en sigma.

Entes con sin fin de aplicaciones:
comportamiento de átomos en la física,
propiciaron nacimiento de ordenadores,
Siendo idóneos para la criptografía.

JOSÉ DE JESÚS CAMACHO MEDINA